Muchas veces nos preguntamos por qué nos cuesta tanto trabajo dejar ir. Lo que sucede es que nos cuesta comprender que los cambios y las pérdidas son parte ineludible en nuestra vida. Además son necesarias porque nos hacen crecer y madurar.
Las perdidas nos duelen mucho porque nos obligan a renunciar a algo que ya no está y nos obliga a replantearnos nuestra vida sin eso. Nos vemos obligados a enfrentar un cambio y a madurar. Si aprendemos a vivir el aquà y el ahora podemos vivir más plenamente y comprometida-mente en el presente, sin estar atorados en el pasado.
¿Por que nos duelen tanto las perdidas?
Los seres humanos tendemos a apegarnos a las cosas o situaciones, nos resistimos a los cambios o a lo que yo le llamo a "fluir con la vida".
DecÃa Buda, que el sufrimiento es universal y tiene una sola raÃz, el apego. Buda decÃa que nuestra solución es dejar de desear, sino aceptar, soltar. Debemos aceptar más y esperar menos; aprender eso es muy difÃcil pero solamente si aprendemos esto podremos lograr sufrir menos cuando algo en nuestra vida cambia debido a algún tipo de pérdida.
Hay muchas cosas que nos hacen pasar por un duelo, por ejemplo:
Personas que uno pierde (por muerte o circunstancias)
Situaciones de vida que cambian (matrimonio, divorcio, términos de estudio)
Relaciones interpersonales que de modifican
Etapas de la vida que se terminan
"Cuando un duelo se resuelve es cuando somos capaces de recordar lo perdido sintiendo poco o ningún dolor, cuando hemos aprendido a vivir aquello que ya no está y cuando hemos dejado de vivir del pasado para invertir de nuevo toda nuestra energÃa en nuestra vida presente y en los vivos a nuestro alrededor."
¿Cómo elaborar un duelo?
1. Aceptar tus emociones (tristeza, enojo etc.)
2. Acepta ayuda de personas capacitadas para acompañarte y ayudarte en este proceso de pérdida.
3. Date permiso de expresar y sentir las emociones que sientes.
4. Ve cada pérdida como una oportunidad para aprender y asà obtener una ganancia.
5. Continúa con tu vida, conéctate con ella y disfruta de ella.
6. Sé agradecido con lo que la vida te brinda y aun te da.
7. Trata de definir qué significado tiene para ti esa pérdida.
8. Capitaliza tu experiencia y compártela con el mundo.
Lo que no se debe hacer
Negar que pasa algo o que la pérdida te duele.
Abandonarte a ti mismo.
Pensar que esto jamás lo vas a superar.
Perder la paciencia, verás que el tiempo cura todo.
No pedir ayuda si sientes que la necesitas.
Tomar decisiones que involucren cambios de vida importantes en ese momento ya que estamos dolidos y confundidos.
Olvidar. No intentes olvidar lo que pasó, al contrario, recuerda. Cuando elaboras un duelo puedes darle a tu ser querido el lugar que merece en tu corazón, su justo lugar (ni más grande, ni más pequeño) es poder pensar en él y no sentir ya ese dolor. Es verdad que nunca volverás a estar como antes de la pérdida significativa porque la vida cambió pero puedes elegir si este cambio será para mejor.
Esperamos que este articulo te ayude, te acompañe y te de luz.